Tras un polémico comienzo de año marcado por conciliación fallida entre EPM y los contratistas de Hidroituango por 9,9 billones de pesos y una posterior demanda de la empresa a los consorcios, la megaobra avanza en sus obras físicas para quedar en plenitud y poder comenzar a generar energía en el primer semestre del próximo año.Desde diciembre del año pasado comenzaron a ingresar a casa de máquinas la maquinaria necesaria para comenzar la instalación de las unidades de generación 1 y 2, las primeras que entrarán en operación de las 8 que tiene previsto el proyecto.