La pandemia puso a prueba engranajes esenciales para la comunidad internacional y, en algunos casos, fue una puerta para el reconocimiento y la visualización de ciertas actividades. En la Argentina, la logística recorre ese camino.Desde marzo del año pasado, asumió una prueba de fuego y, lejos de haberla concluido, ya recibe distinciones por sus acciones conjuntas, consensuadas y articuladas entre distintos protagonistas.