Los pistones se accionan gracias a la fuerza que genera la bomba hidráulica (de desplazamiento variable o de engranajes), propiciando que los mecanismos de la grúa se activen para iniciar las maniobras de suspensión y elevación de las cargas; mientras que al mismo tiempo, los contrapesos de la grúa ayudan a equilibrar el peso evitando que la máquina se incline o vuelque.